Se le puede homenajear de muchas maneras. Los más gurús estarán agradecidos a ese ojo de halcón que tuvo con las consolas. Sobretodo con la Wii U en la que pocos, incluso en la propia Nintendo, creían. A día de hoy va camino de los 150 millones de unidades vendidas y sobretodo la apertura de las consolas a franjas de edad más jóvenes y a mujeres.
Pero no es solo por las consolas por lo que la gente lo valora. Un presidente no es recordado a bien si no se siente. Y los fans de Nintendo, servidor incluido, sentimos lo que ha sido él como creador de juegos. Empezando por Earthbound, pasando por el mítico Kirby's Dreamland, el gran trabajo con los dos primeros juegos de Pokemon, el Legend Of Zelda, y el lavado de cara de las sagas de Mario y Pokemon. Ni que decir de las proezas como programar el sistema de combate de Pokemon Stadium para la N64 en una semana y sin chuleta alguna, o el programar en apenas 3 semanas el Super Smash Bros de la Game Cube.
Pero esto también se queda corto porque lo que hizo por los fans y gamers en general fue algo más grande. Llevar a Nintendo a nosotros. Tono muy afable, no dudaba en pedir disculpas si alguno de sus juegos fracasaba, sus apariciones en las ferias de videojuegos eran un puro espectáculo visual, hacía el ganso cada vez que podía (míticos memes y gifs que nos has regalado).
Por eso no nos extraña que sea una de las personas más respetadas en el mundo del Gaming, hizo que Nintendo ascendiera y se asentara a escala mundial. Esta madrugada el cáncer se llevó a él, pero lo que no se llevará nunca es su recuerdo en forma de juegos y de frases tan míticas como la el E3 hace ya 10 años: "En mi tarjeta pone que soy un Presidente, en mi mente programador pero en mi corazón jugador"
Hoy lloramos junto a los Kirby, Mario, Luigi, Zelda, Pikachu, a los millones que hemos sentido como él nuestro corazón gamer. Pero no es para decirle sayonara (adiós) porque su mano seguirá en esos juegos que tenemos en nuestro baúl. Hoy es día de darle gracias por habernos marcado, haber conseguido que millones de personas quieran soltar impactruenos, comer champiñones y hacernos grandes, vestirnos con nuestra capucha verde y gran espada y convertirnos en bolas rosadas con mucha hambre, por haber sido alguien que ha sabido ser un presidente de prestigio, un gran programador y un Gamer de corazón. Gracias Satoru, Harigato Iwata-san.
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